La Verdadera Palabra

Qué te crees ahora estúpido, ¿poeta?.
¡Patrañas! Nunca lo eres.
Un tipo que escribe pavadas
en un papel en blanco
y hace comas y rayas
en un mundo que ya tiene
muchas comas y rayas.
No eres nadie,
ni nadie eres para,
eres otro más de esos,
de esos que escriben y se creen poetas.
No eres un Charles o un Rainer
ni un André y menos un Paul.
Eres un tipo que junta palabras,
¡crees que eso es poesía!, ¡basura!.
Poesía es cantar, es hablar, es vivir y morir
encadenado a una piedra.
¡Qué te saquen los ojos esos cuervos!
¡Qué devoren tu corazón y tu alma!
¡Qué abran tus entrañas y se bañen en tu sangre!
¡Eso es poesía amigo, eso es poesía!

Distancia

a mi madre

Te recuerdo de niño
lavando platos
cocinando, barriendo
conversando con el gato,
bella y radiante
el lugar no importaba
menos la tierra y el barro,
los perros afuera ladrando
la brisa leve de los invernaderos
las lechugas, los tomates
el brazo de agua a un lado de la casa,
arroz con papas fritas para el domingo
de noche la camisa planchada
corbatas, zapatos lustrados
preparados para la madrugada,
Felipe riendo y jugando
con el pasto, la tierra, el barro
Sebastián en la cuna
junto a tus brazos incanzables
y a tu corazón enorme
donde cada uno tiene su espacio.
Hoy te miro
y te ves cansada, triste y enamorada
pendiente a la hora más inoportuna
atendiendo la nada
Felipe ya no juega con tierra ni barro
Sebastián ya no está en tus brazos
estamos todos viejos y solitarios
perdidos en algún lugar de tu corazón
y tú en algún lugar del mío.

Mareas

"Todo se transforma"
dice un cantautor de orígen uruguayo
en los viejos parlantes
de esta no tan vieja casa.

"Nada se pierde, todo se transforma"
dice nuevamente el coro
que estremece al más impune dictador
que duerme con la muerte bajo su almohada.

"En un rincón de la Rioja
movió el aspa de un molino"
mientras veo entre mis dedos
el amarillo crepúsculo de la nicotina.

"Transformado volvería a darte las gracias"
y recordé aquella muchacha dulce de mirada cautiva
y la recordé a ella
y la recordé a ella.

"Nada se pierde, todo se trasnforma"
y aparece nuevamente el coro
dejando atrás cualquier espacio para olvidar
un dejo de poesía.

"Nada se pierde, todo se transforma"
¡digno de Heráclito!

The Real Eudaimonía

Ya son las 12
y los abrazos y besos de la gente
de mi gente
hacen fila junto a la mesa.
Un par de minutos de felicidad
y luego, como un rebaño
brindan por mí
ríen por mí
hablan por mí.
Todos más contentos
todos más llenos
todos más ebrios
y todos más felices que yo.
Todos un poco más que yo.
Ellos no entienden que todo se va
que el Ser no es el mismo.
Como si fuese un trago
que dura 5 segundos del paraíso
se va, se bebe, se saborea, se vomita
y la felicidad es lo mismo
no es el fin último
como lo pensaba Aristóteles
o mi profesor de filosofía.
Es un instante irrepetible y voraz
dura lo que dura la palabra
y se acaba
como se acaba la vida
como se acaba el amor de un viernes por la noche
como se acaba el pan en la mesa del domingo
como se acaba la risa de un sábado de madrugada
y como se acaba una canción de Coltrane.

2 dedos de frente

Un tipo toma aire
hincha sus cachetes
engulle su alma
y lanza un alarido de esos molestos
que quiebran la pasividad del entorno.
Al rato, se inclina levemente
carga su cuerpo hacia la izquierda
frunce el ceño
pone cara de angustia
y nos estremece, desde sus entrañas,
con un sonido catacúmbico.
Y cada vez que lo hacía
el silencio y las miradas no hacían mella
en su estúpida mente.
Luego, con aires de grandeza
y mientras sube y baja la causa de la perdición del hombre
hace sonar sus narices
y de la boca misma del bastardo
escupe su inteligencia
al piso frio e inerte.
Pablo le miró inquisidoramente a sus ojos
y le dijo:
"¡¿Dónde está tu sentido común viejo?!"